Memoria de san Juan, obispo de Constantinopla y doctor de la Iglesia, antioqueño de nacimiento,
que, ordenado presbítero, llegó a ser llamado “Crisóstomo” por su gran elocuencia.
Gran pastor y maestro de la fe en la sede constantinopolitana, sufrió el destierro por la
facción
de sus enemigos, y al volver del exilio por decreto del papa san Inocencio I, como consecuencia
de los maltratos recibidos de sus guardas durante el camino de regreso, entregó su alma a
Dios en Comana, localidad del Ponto, el catorce de septiembre.
Nació en Antioquía, de padres cristianos, hacia el año 349. Su madre era un modelo de virtud.
Estudió retórica bajo
Libanius, el mas famoso orador de su época y en el 374 comenzó una vida de anacoreta en las
montañas. En el 386,
su mala salud le forzó a regresar a Antioquia. Allí fue ordenado sacerdote. Ejerció, con gran
provecho, el ministerio
de la predicación.
El año 397 fue elegido obispo de Constantinopla, cargo en el que se comportó como un pastor
ejemplar, esforzándose
por llevar a cabo una estricta reforma de las costumbres del clero y de los fieles.
Su rectitud en proclamar y defender la verdad le ganó muchos enemigos. La oposición de la corte
imperial y de los
envidiosos maquinaron acusasiones contra el y lo llevaron dos veces al destierro y eventualmente
a Pythius en la
periferia del imperio. Uno de sus enemigos, Theophilus, Patriarca de Alejandría, se arrepintió
antes de su muerte.
Otro enemigo era la emperadora Eudoxia.
Tuvo el consuelo de contar siempre con el apoyo del Papa y llevó todas las tribulaciones con
gran valentía y fe.
Acabado por tantas miserias, murió en Comana, en el Ponto, el día 14 de septiembre del año 407.
Contribuyó en gran manera, por su palabra y escritos, al enriquecimiento de
la doctrina cristiana, mereciendo el apelativo de Crisóstomo, es decir, «Boca de oro».
Nombre:
Juan (Masculino)
Significado:
Boca de oro, de origen Griego
Celebran:
Los Juan suelen celebrar el 24-jun:
San Juan Bautista (Natividad)